Pregunta
Respuesta
Con ese diagnóstico inicial de linfadenitis inespecífica, es decir, aumento del tamaño de los ganglios linfáticos por inflamación sin causa clara, yo me quedaría bastante tranquila y, desde luego, con esa complicación sufrida (parálisis facial) no aceptaría nueva biopsia del nuevo bulto.
Lo más probable es que se trate de un nuevo ganglio inflamado y aumentado de tamaño, problema bastante frecuente en relación con infecciones del área otorrinolaringológica: garganta, boca, nariz y oídos, ya que los procesos habitualmente infecciosos o inflamatorios que afectan a esas zonas (faringitis, amigdalitis, sinusitis, otitis, procesos de la boca, etc.) suelen drenar su linfa a través de los ganglios de las cadenas ganglionares latero-cervicales del cuello.
Muchos de esos bultos desaparecen espontáneamente pasadas semanas o meses y no hace falta hacer nada en especial; como mucho, a veces prescribimos tratamiento antiinflamatorio si molestan o duelen.
En mi opinión sólo debería preocuparse, y probablemente sus médicos deberían investigar, si los ganglios aumentados de tamaño se extendieran por otras áreas del cuerpo (ingles, axilas, otras partes del cuello, etc.) lo que podría suponer un trastorno ganglionar de algún tipo.
En cuanto al tema de la anemia por falta de hierro, pienso se trata de un hallazgo casual, muy habitual en mujeres jóvenes que tienen reglas abundantes que, a largo plazo, determinan esa falta de hierro. El tratamiento es a base de pastillas de hierro, como le han propuesto, con lo que el problema se soluciona en pocos meses.
Mi consejo es que siga las recomendaciones de su médico de familia que la orientará en sus enfermedades, con los comentarios que he hecho anteriormente, si le parecen razonables.
Esperando haber podido ser de ayuda reciba un cordial saludo,
Dr. Salvador Pertusa Martínez