Las “ratas voladoras” podrían tener una insospechada utilidad como controladoras de la salud de la población.
Consideradas como una plaga en algunas ciudades (hace unos años Barcelona gaseó las suyas), las palomas, esas “ratas voladoras”, podrían tener una insospechada utilidad como controladoras de la salud de la población.
Las muestras de sangre tomadas a cientos de palomas enfermas en Nueva York, entre 2010 y 2015, arrojaron altos niveles de plomo solo en verano. Exactamente lo mismo que pasaba con las muestras de plasma de niños igualmente enfermos. Los distritos urbanos con niveles altos de plomo correspondían igualmente en unas y otros.
"Respiran el mismo aire, andan por las mismas aceras y con frecuencia comen lo mismo que nosotros. ¿No podríamos usarlas para monitorizar los posibles peligros ambientales para la salud, como la contaminación con plomo?", planteó la directora del estudio, Dra. Rebecca Calisi, de la Universidad de Columbia, en Nueva York.
Los investigadores dijeron que no está claro cuáles son las fuentes del plomo urbano. El de la gasolina se prohibió hace décadas y, aunque algunas viviendas todavía tienen pintura con plomo, las palomas no se expondrían al plomo por esa vía.
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Otra posibilidad son las carreteras y las obras, donde puede producirse exposición al plomo en el aire, dijeron los investigadores. Las palomas ingieren gravilla de la carretera para ayudarse en la digestión. Y los niños podrían llevar plomo a casa en los zapatos.
En algunas ciudades europeas se usan palomas para monitorizar la contaminación, pero este es el primer estudio que compara los niveles de plomo en palomas y niños, dijo Calisi.
"Es un ejemplo de cómo podemos usar las palomas para controlar la ubicación y la prevalencia de los contaminantes", afirmó Calisi en un comunicado de prensa. Las aves se pueden utilizar para vigilar los peligros para la salud humana, añadió.
Los investigadores prevén ampliar la investigación, publicada en la revista Chemosphere, para incluir otros contaminantes, como otros metales pesados, pesticidas y retardantes del fuego.