
Tápese una de las fosas nasales presionando ligeramente uno de los laterales de la nariz con el dedo.
Los nebulizadores o pulverizadores nasales son una solución o suspensión de un fármaco que se pulveriza en las fosas nasales para producir un efecto local directamente en la nariz.
- Agite el nebulizador.
- Suénese la nariz para que las fosas nasales estén limpias.
- Lávese las manos.
- Destape el nebulizador.
- Incline la cabeza ligeramente hacia delante.
- Tápese una de las fosas nasales presionando ligeramente uno de los laterales de la nariz con el dedo.
- Introduzca la punta del nebulizador en la otra fosa nasal y comience a aspirar lentamente por la nariz. Al mismo tiempo que respira, manteniendo el nebulizador hacia arriba, pulverice una vez dentro de la fosa nasal.
- Retire el nebulizador de la nariz y espire por la boca.
- Incline la cabeza hacia detrás para facilitar que la medicina se extienda.
- Repita el paso número 7 si es necesaria una segunda dosis en la misma fosa nasal.
- Repita este procedimiento para la otra fosa nasal si así lo ha indicado el médico.
- Vuelva a tapar el nebulizador.
Otros consejos útiles
- Algunos nebulizadores nasales dejan un sabor desagradable cuando se extienden por la garganta. Un trago de agua u otro líquido quitará este mal sabor.
- No se debe compartir pulverizadores nasales con otras personas.
- Los nebulizadores nasales descongestivos no deben ser utilizados más de una semana ya que puede ser causa de que la congestión reaparezca (congestión de rebote).
- FECHA DE CADUCIDAD: nunca se debe utilizar los nebulizadores nasales tras la fecha de caducidad, ya que pueden estar contaminados con suciedad o bacterias. Siga las instrucciones indicadas en el prospecto. Escriba la fecha en la que ha abierto el nebulizador en el mismo frasco para que sepa cuándo deshacerse de él.
- Los medicamentos siempre deben mantenerse fuera del alcance de los niños.
- Los nebulizadores nasales deben limpiarse al menos una vez a la semana, o con mayor frecuencia si se taponan.
- Si olvida la administración de una de las dosis, haga uso del pulverizador nasal tan pronto como lo recuerde y continúe con el tratamiento habitual.
- Utilice siempre el nebulizador nasal de acuerdo con lo que está escrito en el prospecto o conforme a lo que haya indicado el médico o farmacéutico.
- Los nebulizadores nasales no deben administrarse de forma oral.
- Informe al médico o farmacéutico si accidentalmente se administrara una cantidad superior a la indicada.
- Una vez finalizado el tratamiento, tire a la basura el nebulizador.